REFLEXIONES SOBRE “EL CORAZÓN DE PIEDRA”
Cuando uno se encuentra con el dudoso honor de recibir un “Corazón de piedra” no es suficiente con buscar excusas, ni justificar los hechos escudándose, como siempre, en las responsabilidades de los otros.
Una vez más, esta es la actitud de Tomás Hermelo, Concejal de Benestar Social del Concello de Cangas, cuando manifesta públicamente, a través de la prensa, su malestar y rechazo por ese reconocimiento que la Asociación de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales, le otorga a Cangas, por la poca inversión social que este Concello realiza.
Las excusas, siempre las mismas, que si la política social corresponde al Gobierno del Estado, que los créditos, las deudas y el Plan de Ajuste son los que impiden al Concello dedicar más presupuesto a los gastos sociales…
Pero olvida decir el Sr. Concelleiro que se llegó a un Plan de Ajuste precisamente para poner fin al TREMENDO DESAJUSTE económico en el que dejaron sumido a este Concello personas que gobernaban hace unos años, y que hoy son también sus socios en el gobierno. Olvida hablar, o quizás es ignorancia, de las deudas que dejaron sin pagar a personas y colectivos que realizaban trabajos y servicios, también de carácter social, en nuestro Concello.
La solidaridad con las personas, el apoyo a los colectivos sociales más desfavorecidos, que llenaban los programas electorales de quienes hoy nos gobiernan brillan por su ausencia.
Y ahora, ante la evidencia de los hechos, son muchos los vecinos de Cangas que se preguntan:
¿Cuál es la implicación del Concello con el Comedor Social de Cangas, por poner un ejemplo, cuando aún no cumplió su compromiso de colaborar con 1.600 euros antes de terminar el ejercicio del 2016, y tampoco hace entrega de la subvención de 5.500 euros recibidos de la Diputación de Pontevedra con ese mismo fin?
Y ¿dónde está el “alma” de ese concelleiro del área, que todavía no tuvo tiempo, en un año y medio de legislatura, de visitar y conocer ” in situ”, la labor y las necesidades de todas las personas que como usuarios y voluntarios llevan adelante un trabajo encomiable y muchas veces no suficientemente valorado y reconocido por quienes nos gobiernan.
¿Y qué decir de quien deja perder una subvención de casi 150.000 euros destinados a sufragar los gastos del Aula de Estimulación de nenas/os, por pura incompetencia, por falta de interés y abandono de sus responsabilidades?
Ante tanto desatino, no nos extraña en absoluto que se entregue ese corazón de piedra a aquellos que, en lugar de colaborar, día a día manifiestan su insensibilidad y su falta de compromiso con aquellos que son más vulnerables.
Dolores Gallego, concelleira do PP de Cangas.